Por Becca Owens
Para alguien que vive con ansiedad, un episodio de pensamientos ansiosos abrumadores o un ataque de pánico puede sentirse agobiante. No poder volver a la calma es una experiencia aterradora, y puede cambiar la forma de ver el mundo durante bastante tiempo. De hecho, el miedo a entrar en otro episodio de ansiedad puede causar tantos problemas a las personas que han experimentado ataques de ansiedad en el pasado. Es posible que dejen de realizar cualquier actividad que crean que ha provocado la ansiedad inicial para protegerse de futuros episodios.
¿Qué son los desencadenantes de la ansiedad?
Aunque para muchos la ansiedad comienza sin una causa aparente, la mayoría de las personas -con el tiempo- reconocen situaciones y acciones que provocan sentimientos de ansiedad y pánico. Estos son los llamados desencadenantes. No son la razón por la que alguien tiene un diagnóstico de trastorno de ansiedad -las causas de los trastornos de ansiedad son complicadas y pueden tener factores que van desde la genética y las experiencias pasadas hasta la falta de habilidades de afrontamiento-, pero pueden exacerbar los síntomas y señalar episodios significativos de ansiedad.1
Muchos desencadenantes comunes de la ansiedad se sienten de forma intuitiva y se asocian de forma natural con el pánico y la ansiedad, como las situaciones de alto estrés, las enfermedades debilitantes o que ponen en peligro la vida y las relaciones insanas o abusivas. Otros desencadenantes pueden parecer patrones de vida normales para algunos, pero causan importantes problemas de salud mental para otros. Entre ellos se encuentran los siguientes:
- Comida y agua – La mayoría de la gente sabe que se necesitan comidas regulares y saludables y mucha agua para mantenerse sano, pero descuidar estas necesidades diarias puede hacer que la gente se sienta desequilibrada y más propensa a la ansiedad. Es importante no saltarse las comidas ni dejarse deshidratar para sentirse lo mejor posible tanto física como mentalmente. Ciertos aditivos, como los colorantes alimentarios y los edulcorantes artificiales, también pueden ser desencadenantes para algunas personas, por lo que es importante prestar atención a lo que se consume y tratar de comer la mayor cantidad posible de alimentos integrales.
- Medicamentos y suplementos – Los medicamentos basados en hormonas o los de venta libre y los suplementos pueden cambiar el equilibrio del cuerpo y provocar episodios de ansiedad. En particular, cualquier cosa con cafeína añadida -incluso en alimentos y bebidas- puede ser un desencadenante inesperado. Hacer una lista de todo lo que toma y explorar con su médico lo que podría ser un desencadenante podría ayudar a aliviar los síntomas de ansiedad para algunos.
- Drogas, tabaco y alcohol – Abusar de las drogas y el alcohol o confiar en el tabaco para calmar los sentimientos de ansiedad es probable que sólo empeore los síntomas. Los componentes de los cigarrillos, así como su humo, provocan cambios en la presión sanguínea y en la respiración, y las drogas y el alcohol suelen provocar una serie de efectos secundarios y problemas de salud que conducen a una ansiedad más profunda.2
- Trastornos del sueño – No dormir lo suficiente tiene un efecto negativo general sobre la salud. Asegurarse de que se descansa lo suficiente cada noche y crear un entorno que promueva un sueño de calidad es esencial para sentirse mejor. Lo mejor es apagar las pantallas mucho antes de acostarse y evitar enviar mensajes de texto o jugar con el teléfono en la cama.3
- Situaciones sociales y actuaciones – Para muchas personas con ansiedad, tener que ir a una fiesta o actuar delante de otros puede ser un desencadenante importante. Sin embargo, ninguno de ellos puede evitarse por completo en la vida normal. Los estudiantes siempre serán llamados por los maestros y profesores, y los amigos siempre tendrán cenas de cumpleaños o fiestas. Aprender a tener un plan para estos momentos -tanto las situaciones imprevisibles como las que puedes anticipar- puede ayudarte a sentirte tranquilo y a ser capaz de manejar cualquier situación. Esto también aumentará su confianza y le ayudará a evitar pensamientos negativos debilitantes.
- Finanzas – Todo lo relacionado con el dinero puede provocar ansiedad en muchas personas. Ya sea que le preocupe poder pagar las facturas, salir de las deudas, ahorrar lo suficiente para la jubilación o sentir la presión de tener que seguir el ritmo de los demás, las finanzas pueden causar una ansiedad continua. Identificar sus desencadenantes específicos y hacer planes para superar estos obstáculos financieros puede ayudarle a mantener un estado mental más saludable.
¿Qué puedo hacer con los desencadenantes de la ansiedad?
Aunque la tentación puede ser evitar todos los desencadenantes de la ansiedad -y para algunos como las drogas, el alcohol, la cafeína y los aditivos, eso puede ser lo mejor- muchos desencadenantes es mejor superarlos que evitarlos. Trabajar con un psicoterapeuta puede darle una idea de cómo prepararse para las situaciones que le causan ansiedad y herramientas para trabajar en esos momentos de una manera saludable. Esto le permite seguir curándose y vivir su vida al mismo tiempo.
Para aquellos que no tengan un trastorno de ansiedad pero estén en un contexto cercano con los que sí lo tienen, entender cómo funcionan los desencadenantes puede ayudarle a apoyar a los que le rodean y animarles a seguir haciendo el duro trabajo de curación. Ser especialmente sensible a sus desencadenantes únicos puede ayudarles a sentirse queridos y darles confianza para superar situaciones difíciles.
Ayuda para los trastornos de ansiedad y pánico
Si usted o un ser querido está luchando contra la ansiedad o el pánico continuos, queremos ayudarle a sanar. En el Campus Talbott, buscamos tratar a la persona en su totalidad, mente, cuerpo y alma, para que pueda vivir una vida plena con menos síntomas de su diagnóstico. Llame hoy mismo a nuestra línea de ayuda gratuita las 24 horas del día para hablar con un asesor de admisiones sobre cómo puede comenzar su viaje hacia la salud.