El trastorno del espectro autista, o TEA, es complejo y lleno de matices.

Por lo general, no hay sólo uno sino varios problemas que afectan a una persona con TEA. Estos pueden incluir síntomas relacionados con la condición. Además, también puede haber síntomas secundarios. Éstos suelen estar relacionados con otros problemas de salud mental que también acompañan al autismo.

Para desglosar los síntomas del autismo en categorías más definidas, los investigadores han creado un sistema. Hay tres categorías, o niveles, de autismo. Los criterios para estas categorías están formalizados en la quinta edición del Manual de Diagnóstico y Estadística, o DSM-5.

Por supuesto, a nadie le gusta ser etiquetado. Y estas clasificaciones no pretenden discriminar. Más bien, ayudan a enfocar mejor el cuidado, la atención y los servicios necesarios para ayudar mejor a alguien con autismo.

Veamos más de cerca las tres.

Autismo de nivel 1

El primer nivel de autismo se considera una forma leve de TEA. Alguien que caiga en este nivel de autismo es capaz de interactuar con otras personas. Sin embargo, todavía pueden tener dificultades y necesitar entrenamiento y asistencia.

Por ejemplo, en algunas de las siguientes áreas:

• Problemas para iniciar una conversación
• Desinterés por interactuar socialmente con otras personas
• Problemas con las conversaciones dinámicas y fluidas
• Dificultades para hacer amigos y entablar relaciones
• Dificultad para adaptarse a los cambios o cambiar de tareas
• Incapacidad para formar y comunicar frases completas.

Como se ha señalado, las personas diagnosticadas con autismo de nivel uno tienen la capacidad de desenvolverse de alguna manera en la vida y en la situación social por sí mismas. Sin embargo, sin apoyo, generalmente pierden los matices y detalles.

Autismo de nivel 2

El autismo de nivel dos es una categoría más aguda. Las personas con este diagnóstico luchan con todo lo mencionado en el nivel uno, sólo que de forma más intensa. Por lo tanto, necesitan mucho más apoyo.

Ejemplos de problemas para aquellos con autismo de nivel dos incluyen:

• Tienen problemas más significativos cuando se trata de la comunicación verbal y también no verbal.
• Hablan con frases simples y sencillas
• Tienen comportamientos repetitivos
• Tienen intereses más reducidos y específicos
• Luchan con el cambio
• Muestran una marcada disminución del interés por las situaciones o interacciones sociales

Típicamente, es mucho más difícil para estas personas desenvolverse en la vida cotidiana y en los entornos sociales. Por lo tanto, necesitan mucho más apoyo, incluida la ayuda profesional para realizar ajustes.

Nivel 3 de autismo

Esta es la forma más grave de autismo, y por lo tanto requerirá la mayor cantidad de apoyo y servicios profesionales. Generalmente, las personas con este nivel de autismo no son capaces de manejar situaciones cotidianas por sí mismas.

Con el nivel tres de autismo se verá:

• Capacidad de hablar sólo una o dos palabras a la vez
• Raramente, si es que lo hacen, interacciones sociales por sí mismos
• Muy rígidos en su comportamiento
• Dificultad para adaptarse al cambio, lo que provoca intensos sentimientos de angustia
• Conductas repetitivas distintas

Un espectro de síntomas

Es importante tener en cuenta que hay una razón por la que el TEA cae a lo largo de un espectro. Alguien puede recibir un diagnóstico de autismo pero estar dentro de un amplio rango de síntomas.

Por ejemplo, se puede considerar que tiene un autismo de nivel uno. Eso significa que tienen la capacidad de ser mucho más independientes que alguien que tiene un diagnóstico de nivel tres, que requiere mucho más apoyo y tratamiento.

Por lo tanto, es fundamental entender que no hay un enfoque único para el autismo. Cada individuo necesita una evaluación exhaustiva y recibir un plan de tratamiento específico para sus necesidades. Es especialmente importante que los miembros de la familia comprendan el alcance de los síntomas del autismo.

Apoyo para el autismo

Si busca apoyo para manejar el autismo, hay muchas opciones disponibles. De hecho, puede haber múltiples servicios de apoyo trabajando al mismo tiempo.

Algunos ejemplos de apoyo para adultos con autismo incluyen:

• Ayuda académica para los matriculados en el colegio o la universidad
• Asesoramiento laboral
• Servicios recreativos
• Entrenamiento en habilidades para la vida

Otro apoyo importante es el asesoramiento en autismo. Un consejero de autismo es alguien que está capacitado y tiene experiencia en el trabajo con personas que tienen el trastorno. Esto es importante, ya que un consejero puede ser otro recurso para entender cómo funciona el autismo y de qué manera afecta a su vida o a la de su ser querido.

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Un diagnóstico de autismo no significa que alguien no pueda llevar una vida rica y satisfactoria. Sin embargo, sí significa que la persona necesitará ciertos apoyos y recursos. Entender los diferentes niveles de autismo y cómo afectan a alguien ayuda a asegurar que reciban la ayuda que necesitan.

Si usted o alguien que conoce tiene TEA, considere buscar un consejero de autismo. Te invito a llamar / enviar un mensaje de texto 256-686-9195.