Un teléfono Android de primer nivel puede costar más de mil dólares, y por ese dinero, obtendrás algunas características increíbles. Tendrá una pantalla estelar, una cámara de primera, montones de almacenamiento y una experiencia de mensajería absolutamente atroz.

Es un problema. De hecho, siempre ha sido un problema. Google se ha pasado casi una década intentando -y fracasando- solucionarlo con un elenco siempre cambiante de aplicaciones poco compatibles. Mientras que los usuarios de iPhone han tenido la simplicidad de iMessage incorporada, los usuarios de Android han sido abandonados a su suerte.

Ahora, la compañía está haciendo algo diferente. En lugar de aportar una aplicación mejor, está intentando cambiar las reglas del juego de los mensajes de texto, a escala global. Google ha estado acorralando silenciosamente a todas las principales compañías de telefonía móvil del planeta para que adopten una tecnología que sustituya a los SMS. Se va a llamar «Chat» y se basa en un estándar llamado «Perfil Universal para Servicios de Comunicación Ricos». El SMS es la opción por defecto a la que todo el mundo tiene que recurrir, por lo que el objetivo de Google es hacer que la experiencia de envío de mensajes por defecto en un teléfono Android sea tan buena como la de otras aplicaciones de mensajería modernas.

Como parte de ese esfuerzo, Google dice que está «pausando» el trabajo en su más reciente entrada en el espacio de la mensajería, Allo. Es el tipo de «pausa» que implica transferir a casi todo el equipo del proyecto y poner todos sus recursos en otra aplicación, Android Messages.

Google no construirá el clon de iMessage que los fans de Android han clamado, pero parece haber engatusado a las compañías para que lo hagan por ellos. Para conseguir algún tipo de victoria en la mensajería, Google ha tenido que admitir primero su derrota.

Qué será Chat

Chat no es una nueva aplicación de mensajes de texto. En su lugar, piensa en ella más bien como un nuevo conjunto de funciones dentro de la aplicación ya instalada en la mayoría de los teléfonos Android. «Chat» es el nombre amigable para el consumidor de Rich Communication Services (RCS), el nuevo estándar que está destinado a suplantar a los SMS, y se activará automáticamente dentro de Android Messages, la aplicación por defecto del sistema operativo para enviar mensajes de texto.

Cuando los usuarios empiecen a utilizar Chat, obtendrán muchas funciones que son estándar en cualquier otra aplicación de mensajería, como los recibos de lectura, los indicadores de escritura, las imágenes y los vídeos de alta resolución y los mensajes de grupo.

Pero recuerda que Chat es un servicio basado en el operador, no un servicio de Google. Es simplemente «Chat», no «Google Chat». Como muestra de su importancia estratégica para Google, la empresa ha encabezado el desarrollo del nuevo estándar, de modo que los servicios de Chat de cada operador sean interoperables. Pero, al igual que los SMS, el chat no estará cifrado de extremo a extremo y seguirá las mismas normas de interceptación legal. En otras palabras: no será tan seguro como iMessage o Signal.

Los nuevos servicios de Chat se activarán para la mayoría de la gente en un futuro próximo, aunque el calendario lo dictará cada operador. Google es optimista en cuanto a que muchos operadores darán el paso este año, pero podría haber algunos rezagados. Los mensajes de chat se enviarán con tu plan de datos en lugar de con tu plan de SMS, por lo que es probable que sólo se te cobren los datos (mínimos) que cuesta enviar un mensaje. Aunque, de nuevo, dependerá de las operadoras.

Si envías un mensaje de texto a alguien que no tiene activado el chat o no es usuario de Android, tus mensajes volverán a ser SMS, de la misma forma que lo hace un iMessage. Nadie fuera de Apple sabe cuándo (o si) el iPhone soportará Chat.

En lugar de seguir impulsando Allo -o crear otra nueva aplicación de chat-, Google va a introducir nuevas funciones en la aplicación por defecto de Mensajes de Android, como la búsqueda de GIFs y el Asistente de Google. Mensajes de Android será el predeterminado en muchos (pero no todos) los teléfonos Android. Los teléfonos Samsung también serán compatibles con el chat mediante la aplicación de Samsung. Seguirás pudiendo descargar la app de Google si prefieres usarla, aunque parece poco probable que los desarrolladores de terceros puedan crear apps completas habilitadas para RCS.

Reboot again

Google ha puesto a un nuevo ejecutivo a cargo del esfuerzo: Anil Sabharwal. Dirigió el equipo que creó las aplicaciones de Google Photos, que son quizás las aplicaciones de Google más exitosas de los últimos años. También son un gran ejemplo de cómo Google rescató ideas originalmente construidas en Google+ y las convirtió en un gran conjunto de aplicaciones multiplataforma.

Por lo tanto, tiene mucho sentido que el CEO Sundar Pichai encargara a Sabharwal la solución de uno de los problemas más antiguos y molestos de Google. Sabharwal tiene que encontrar una manera de hacer que la experiencia de mensajes de texto por defecto en Android no sólo sea buena, sino que forme parte de una red global dominante que realmente pueda competir con gente como WhatsApp, Facebook Messenger e iMessage. Y tiene que hacerlo sin alienar a ninguno de los cientos de poderosas empresas que tienen intereses en el mercado de los teléfonos inteligentes.

«Llego a esto como una persona de productos de consumo», dice Sabharwal. Hace seis meses, se hizo cargo del equipo de comunicación e hizo un inventario de las ofertas y estrategias de Google. Como resultado del enfoque de Google de «probarlo todo» en el ámbito de la mensajería, la compañía tiene actualmente cuatro grandes aplicaciones de mensajería que compiten entre sí: Hangouts, Allo, Duo y Android Messages.

Vamos a repasarlas una por una. Hangouts se está convirtiendo en una app empresarial para competir con Slack, llamada «Hangouts Chat» en lugar de ser una app enfocada al consumidor. Esa transición está llevando un tiempo y en algún momento, Google tendrá que aclarar su mensajería para los consumidores que todavía están utilizando Hangouts para los mensajes de texto personales. Ahora mismo, la orientación de la compañía es que «la versión de consumo de Hangouts se actualizará a Hangouts Chat… pero nuestro enfoque para Hangouts sigue siendo la comunicación y la mensajería empresarial/de equipo». No me sorprendería que algún día se pusiera a disposición de los consumidores una versión gratuita, pero, al igual que con Allo, podría ser el momento de empezar a buscar alternativas.

Y Duo, la nueva aplicación de videochat de Google, tiene en realidad un éxito sorprendente; una cuarta parte de las llamadas de Duo son hacia o desde un iPhone. Pero es principalmente una aplicación de videochat, lo que deja a Allo y Android Messages: dos aplicaciones que, desde la perspectiva de «producto de consumo», hacen esencialmente lo mismo.

Android Messages tiene todos los usuarios. Aunque los teléfonos de Samsung no utilizan Android Messages como aplicación de SMS por defecto, la mayoría de los otros grandes fabricantes sí lo hacen (fuera de China, al menos). Eso suma 100 millones de usuarios activos mensuales, según Sabharwal. «Al fin y al cabo… la aplicación nativa de SMS es donde están los usuarios», dice. «No están interesados en ir a un lugar diferente para usar los SMS».

La gente, incluso en 2018, tiende a usar simplemente la app por defecto. Aunque WhatsApp y Facebook Messenger tienen más de mil millones de instalaciones cada una, esos usuarios siguen recurriendo a los SMS cuando tienen que hacerlo. Es la opción universal por defecto; todos los teléfonos la soportan y siempre funciona. Sabharwal calcula que cada año se envían 8 billones de mensajes basados en SMS.

Allo, aunque es una aplicación de mensajería perfectamente capaz y funcional, nunca ha conseguido crear una gran base de usuarios. Sabharwal miró a Allo y vio «un conjunto claramente grande de características del producto, un gran conjunto de capacidades.» Miró a Android Messages y vio «un producto que tiene un tremendo impulso»

Así que el movimiento era obvio: trasladar todo ese esfuerzo de Allo, que no tiene un camino claro para conseguir más usuarios, y ponerlo en migrar las características de la app al predeterminado, Android Messages. «Lo primero es que voy a unir estas cosas», dice Sabharwal. «Esa es la primera decisión que hemos tomado»

Poniéndolo más claro: Google está renunciando a tener su propia aplicación de mensajería para consumidores, un competidor de cabeza para Facebook Messenger. «Hay un montón de grandes productos de mensajería y experiencias que están ahí fuera», dice Sabharwal. «El hecho de que Google quiera ser uno de ellos no es una razón para invertir o crear productos. Fundamentalmente, creamos productos porque creemos que podemos ofrecer experiencias de usuario mejores y mejoradas».

Da un paso atrás. Parece ridículo que una empresa tan grande y poderosa como Google simplemente renuncie a competir directamente en el espacio de la mensajería, pero aquí estamos. La pregunta, entonces, es ¿cómo diablos hemos llegado hasta aquí?

Todas las aplicaciones que no funcionaron

El plan de Google en esta ocasión es mucho más complicado que el simple lanzamiento de una nueva aplicación de mensajería. Para ponerla en marcha, ha tenido que acorralar a más de 40 operadores y casi una docena de fabricantes para que adopten un nuevo estándar. Ha tenido que asegurarse de que Chat funcione igual en todas partes y de que tenga un conjunto decente de funciones. Ah, y todas esas empresas son feroces competidores que desconfían unos de otros y de Google.

Es lo más parecido al camino más difícil y tortuoso que puedo imaginar para arreglar la mensajería en Android. También es probablemente uno de los únicos caminos que le quedaban a Google por intentar.

El callejón sin salida de la mensajería más prominente de Google fue Hangouts. Lanzado hace casi exactamente cinco años, fue el intento más ambicioso de Google para competir con iMessage, WhatsApp y Facebook Messenger. Tuvo un lanzamiento enorme y espléndido, acorde con su alcance, y logró fusionar con éxito un montón de aplicaciones dispares de Google en un sistema único y unificado.

Hangouts se deshizo por las prioridades corporativas a menudo dispersas de Google y, francamente, a veces la incapacidad institucional para ejecutar en los productos de consumo. Comenzó como un producto que estaba profundamente enredado en Google+, la fallida red social de Google. Sacar a Hangouts de ese fiasco llevó años.

Hangouts también se convirtió en un punto de integración para otros servicios como SMS, un servicio de transmisión de vídeo en directo, Google Voice y Project Fi. Eso suena bien en teoría, pero en la práctica, significó que el propósito general de la aplicación fue cambiando. En un momento dado, era una aplicación integrada de SMS y chat, y al siguiente, no. Al mismo tiempo, la aplicación empezaba a ser lenta y pesada en los teléfonos y demasiado básica en los ordenadores de sobremesa.

En lugar de reducir Hangouts (está demasiado integrada en la cultura de trabajo interna de Google como para hacerlo), Google la transformó. Hangouts es ahora una aplicación de chat para empresas diseñada para competir con Slack.

El siguiente camino que tomó Google fue más obvio: lanzar una nueva aplicación de mensajes de texto para móviles y convencer a la gente de que la usara. Esa aplicación fue Allo, que se lanzó hace dos años.

Allo es una aplicación «fina», con todas las características que se esperan junto con la integración con Google Assistant, que se lanzó junto a Allo. «La estrategia detrás de Allo era ‘construyamos un producto de mensajería para el consumidor realmente bueno desde el principio'», dice Sabharwal.

Pero en 2016 (por no hablar de 2018), simplemente hacer una buena aplicación de mensajería no era suficiente, no cuando tiene que competir con gigantes establecidos. Allo también sufrió probablemente la fatiga de la aplicación de mensajería de Google. A la gente le preocupaba que no tuviera soporte a largo plazo. (Resulta que tenían razón.)

Si vas a lanzar una aplicación de mensajería, necesitas una buena estrategia para lograr el crecimiento. iMessage funcionó porque estaba integrado en el iPhone. WhatsApp funcionó porque estaba vinculado a los números de teléfono y permitía a los usuarios evitar el pago de los SMS. (Y tuvo la ventaja de ser la primera aplicación popular en aprovechar las notificaciones push). Facebook Messenger funcionó porque se construyó en Facebook.

Allo no tenía esa estrategia para adquirir usuarios. Lo más cerca que estuvo Google fue un esquema que utilizaba los propios servicios de Google en Android. Cuando enviabas un mensaje de Allo a alguien que no tenía la aplicación instalada, recibía una notificación push de Google en lugar de un SMS. La notificación les animaba a instalar la aplicación (aunque podían responder directamente sin ella).

Dos años después, menos de 50 millones de usuarios de Android han instalado Allo. Teniendo en cuenta que WhatsApp y Facebook Messenger superan los mil millones de instalaciones, esas cifras no son suficientes. Como dice Sabharwal, «el producto en su conjunto no ha alcanzado el nivel de tracción que esperábamos».

Eso significa que Google ha tenido que admitir que el experimento de Allo no ha funcionado. Como resultado, Sabharwal dice que Google está «pausando la inversión» en Allo. Eso no significa que se está cerrando; Sabharwal dice que Google está «continuando apoyando el producto.» Pero si eres un usuario de Allo, definitivamente es hora de empezar a buscar en otra parte. Mi opinión es que es una aplicación muerta que camina (o, si lo prefieres, envía mensajes de texto).

Hay otra opción que yo y muchos otros siempre hemos esperado que Google tuviera el valor de probar: simplemente copiar iMessage, pero para Android.

Aunque Google no lo diga, creo que ese camino es fundamentalmente demasiado peligroso para la compañía. Uno pensaría que Google tiene más que suficiente influencia para simplemente crear algo que las operadoras tengan que aceptar les guste o no. Qué van a hacer Verizon y Deutsche Telecom y todas las demás, cambiarse a Tizen en señal de protesta? Por favor.

Pero la verdad es que estas operadoras tienen puntos de influencia sobre Google que van más allá de elegir vender teléfonos Android. Android es, después de todo, de código abierto. Y aunque Google puede (y lo hace) dictar algunos requisitos para incluir los servicios de Google, no puede dictarlos todos. Un operador podría establecer Bing como la búsqueda por defecto, por ejemplo, o configurar su propio cliente RCS como la aplicación de mensajes de texto por defecto.

Quizás Google podría haberse salido con la suya con un protocolo de mensajería propietario e incorporado en 2011 cuando se lanzó iMessage. Pero en 2018, a las operadoras no les gusta iMessage, y no van a ver con buenos ojos que un servicio similar actúe por defecto, especialmente en Android, el sistema operativo dominante a nivel mundial. Aunque parece que no van a cobrar precios desorbitados por los SMS a los consumidores, RCS sigue siendo preferible para las operadoras, ya que les dará la oportunidad de vender servicios RCS a las empresas. La GSMA calcula que será un mercado de 74.000 millones de dólares en 2021.

En resumen, Google lo ha intentado casi todo. Sólo quedaban dos caminos: uno que hiciera enloquecer a todos sus socios operadores y otro que les diera las llaves de una nueva y brillante plataforma de mensajería que pudieran llamar suya.

Sabharwal no pinta la decisión de asociarse con los operadores en esos términos, por supuesto. En su lugar, señala la inclinación de Google por mantener Android no sólo abierto, sino neutral. En lugar de la opción nuclear, Google quiere mantener la plataforma al menos nominalmente neutral. «Creemos que hay una experiencia fundamentalmente mejor que podemos ofrecer a los usuarios», dice Sabharwal. Y continúa:

No podemos hacerlo sin estos socios. No creemos en adoptar el enfoque de Apple. Somos fundamentalmente un ecosistema abierto. Creemos en la colaboración con los socios. Creemos en la colaboración con nuestros OEM para poder ofrecer una gran experiencia.

El despliegue

SMS es horrible. Comenzó como una especie de hackeo sobre los sistemas celulares preexistentes, y nunca se desarrolló mucho. El complemento del servicio de mensajería multimedia llegó más tarde y era igual de cutre. Estos servicios no sólo son anticuados, sino también caros. Nadie dice: «Oye, amigo, llámame por MMS», bromea Sabharwal. Dicen «envíame un mensaje». Y de nuevo, la experiencia de envío de mensajes de texto por defecto en Android es mala. Este es un problema que hay que arreglar.

Desde 2007, se suponía que la solución era el RCS, pero éste no ha cuajado por razones totalmente predecibles. Las diferentes compañías desarrollaron versiones incompatibles del «estándar», cada una de ellas tratando de obtener una ventaja. Al mismo tiempo, las empresas tecnológicas se vieron perjudicadas por la creación de productos de mensajería integrados verticalmente que sólo se basaban en las conexiones de datos. Habla con casi cualquier analista del sector tecnológico y verás que no creen que el RCS pueda funcionar. Aquí está Dean Bubley de Disruptive Analysis el año pasado sobre RCS:

Así que ignóralo. No hay clientes, ni casos de uso, ni ingresos asociados a la «mensajería avanzada». Es la misma tecnología zombi de RCS sin sentido que he estado prediciendo con precisión que fracasaría durante la última década. Sigue muerta, sigue arrastrándose y sigue intentando comerte el cerebro. Ha conseguido morder a Google y a Samsung, y probablemente intentarán infectarte a ti también.

Y, sin embargo, Google ha pasado los últimos dos años tratando de conseguir un consenso en torno a algo llamado el «Perfil Universal», una forma estandarizada de hacer que RCS funcione a través de los operadores. La propuesta de Google a los operadores es sencilla: Los SMS van a ser sustituidos de una forma u otra. Puedes formar parte de la sustitución o seguir viendo cómo Apple y Facebook arrasan con la mensajería de texto.

Google también ha estado alineando a las empresas que quieren sustituir el SMS para comunicarse con los clientes. En lugar de un mensaje de texto con un enlace corto, puedes hacer que tu tarjeta de embarque o tu pedido de sándwiches de Subway o lo que sea aparezca directamente en tu aplicación de mensajes de texto. En estos momentos, las mejores opciones para las empresas que quieren ofrecer a sus clientes un servicio de mensajería enriquecido son iMessage y Facebook, que no son tan universales como los SMS. Dos de las más importantes, AT&T y Verizon, acordaron discretamente apoyar el estándar en los últimos meses. Teniendo en cuenta lo díscola que ha sido la historia, me impresiona que Google haya conseguido que todos llamen a esta función «Chat» en lugar de «AT&T super premium advanced messaging plus» o lo que sea. En el momento de escribir este artículo, 55 operadores, 11 fabricantes de equipos originales y dos proveedores de sistemas operativos se han comprometido a adoptar o cambiar al perfil universal RCS.

Los dos proveedores de sistemas operativos que se han apuntado al Perfil Universal: Google y, curiosamente, Microsoft. Eso no significa necesariamente que se pueda esperar una app nativa de Chat en Windows 10, pero sí que es posible. La declaración de Microsoft sobre RCS es, en el mejor de los casos, poco comprometedora: «La compatibilidad con el perfil universal de RCS para capacidades como el marcador y la funcionalidad de mensajería u otras aplicaciones se considera sobre una base de dispositivo por dispositivo, donde hay demanda de esas características»

Desgraciadamente, no es probable que tengamos un momento grande y espléndido en el que Chat «simplemente funcione». Presiono a Sabharwal varias veces sobre esta cuestión: ¿cuándo van a cambiar los usuarios los operadores? «No tengo una bola de cristal», me contesta. «No sé exactamente cuánto tiempo va a pasar, pero realmente sentimos que estamos en la cúspide ahora mismo». Más tarde, cede y dice: «Mira, puedo especular, que creo que es lo que me pides que haga».

«A finales de este año, estaremos en un estado realmente estupendo, y a mediados del año que viene, estaremos en un lugar donde un gran porcentaje de usuarios esta experiencia». Aunque advierte que «diferirá de un país a otro» y de una región a otra. Es probable que Europa y América Latina lo habiliten antes que los operadores estadounidenses. Aun así, subraya: «No se trata de un juego de tres a cinco años. Nuestro objetivo es ofrecer este nivel de calidad en la mensajería a nuestros usuarios de Android en los próximos dos años».

En Estados Unidos, Sprint admite ahora mismo el chat entre teléfonos Android compatibles. T-Mobile ha prometido hacerlo en el segundo trimestre de este año. Cuando pedí un comentario, ni Verizon ni AT&T me dieron un plazo para cuando tienen intención de dar el salto a la compatibilidad con Chat.

El periodo intermedio va a ser molesto. Si tu operador o tu dispositivo no es compatible con Chat, recibirás los antiguos mensajes SMS y MMS, y viceversa. Y lo que es más importante, eso significa que los usuarios de iPhone no formarán parte de este ecosistema.

Pero tengo la corazonada de que se está presionando a Apple para que soporte Chat, no sólo por parte de Google, sino también de las operadoras y otras empresas. Fuentes familiarizadas con RCS dicen que Google, junto con múltiples operadores de telefonía móvil, está en conversaciones con Apple sobre el apoyo a RCS. Apple declinó hacer comentarios.

Control de las operadoras

Si todavía estás tratando de hacerte a la idea de que Google no tendrá una aplicación de chat independiente para el consumidor, bueno, yo también. «La tesis fundamental detrás del protocolo RCS es que es un servicio de las operadoras», dice Sabharwal. Eso significa que los operadores serán los árbitros finales de lo que Chat puede y no puede hacer, y si tendrá éxito. La buena noticia es que Google parece haber reunido a todos los operadores en una caja en la que sus servicios de Chat serán realmente interoperables.

Ahora mismo, se espera que los operadores no cobren tarifas tipo SMS por los mensajes de Chat. «Los mensajes funcionarán como cualquier otro protocolo de mensajería basado en IP. Así que, en ese sentido, será simplemente ‘gratis’ y formará parte de tu plan de datos», dice Sabharwal. Probablemente sea cierto, pero definitivamente está fuera del control de Google. Cualquier estándar de comunicación que dependa de la generosidad de los operadores inalámbricos corre el riesgo inherente de estropearse de decenas de maneras, incluido el precio.

La peor noticia es que las operadoras no son aficionadas a la encriptación fuerte y no tienen un gran historial de contraposición a las demandas gubernamentales de información.

«RCS sigue siendo un servicio propiedad de las operadoras, por lo que la interceptación legal y otras leyes que existen que permiten a las operadoras tener acceso a los datos sigue siendo el caso», admite Sabharwal. Y aunque Google no está cerrando Allo, tampoco está trabajando para crear un servicio de chat que sea tan seguro como iMessage, Signal o incluso Telegram. «En este momento, la respuesta es no. No tendremos esa opción», dice Sabharwal. Allo ofrece un modo «incógnito» que sí admite el cifrado de extremo a extremo, pero eso es todo.

Para una empresa que tiene fama de recopilar rabiosamente los datos de los usuarios y luego convertir esos datos en anuncios y servicios, es sorprendente escuchar que Google no quiere una aplicación de chat propia y operada. Básicamente, parece que Sabharwal no cree que tenga que hacerlo. Y puede que no tenga otra alternativa: la compañía no ha sido capaz de encontrar la manera de hacer que una aplicación de chat propia y operada tenga éxito en casi una década.

«No quiero decir que estemos ‘cediendo la mensajería'», dice Sabharwal. En cambio, Google cree que puede ofrecer los servicios de Google dentro de la aplicación Mensajes de Android. No controlará el transporte de esos mensajes, pero puede mejorar la experiencia del usuario construyendo la propia aplicación.

Así que espera que ocurran un par de cosas en el frente de las aplicaciones. En primer lugar, Google finalmente hará una interfaz web de escritorio para los mensajes de texto. Al menos en la versión inicial, se autorizará con un código QR, al igual que se hace con WhatsApp. Esto hace que sea esencialmente una extensión de tu teléfono, como el cliente de WhatsApp, por lo que el único historial de mensajes que tendrá es el que está en tu teléfono.

En segundo lugar, espera que la aplicación Mensajes de Android adquiera rápidamente más funciones. Con suerte, su desarrollo no se estancará como lo hizo Hangouts. Merece la pena estar atento, porque algunas funciones pueden desarrollarse en la propia aplicación y otras pueden requerir un trabajo de coordinación con todos los operadores en el propio estándar de Chat.

Sabharwal puede explicar los matices de los hubs RCS, las negociaciones con los operadores y los propios servicios en la nube Jibe RCS (opcionales) de Google. Pero más que todo eso, está ansioso por hablar de las características que quiere llevar a Android Messages. Respuestas inteligentes. Asistente de Google. Integración con su otro proyecto, Google Fotos. Organización más clara de los mensajes. Una mejor búsqueda. Más «expresividad» (léase: GIFs y stickers).

Al final del día, a los usuarios les importan esas características. Les importa tener «burbujas azules», esos indicadores culturales de que estás manteniendo una conversación en un canal que no se limita a mensajes de 160 caracteres lanzados al vacío. El camino de Google para hacer llegar esas funciones a los más de 2.000 millones de usuarios de Android en todo el mundo ha sido difícil, por decirlo suavemente.

El despliegue de Chat podría ser igualmente difícil. Algunas operadoras se resistirán, ya sea por obstinación o por incapacidad. Algunos teléfonos Android también podrían quedarse fuera, dependiendo de su fabricante. Se corre el riesgo de que las luchas internas entre todas las empresas que intentan trabajar juntas hagan fracasar todo el esfuerzo. Y, sobre todo en EE.UU., nadie sabe realmente si Apple cederá a la presión para apoyar el RCS o cuándo lo hará. (Apple, como seguramente sabes, no es de las que ceden a la presión.)

Después de hablar de todo eso, Sabharwal finalmente me deja echar un vistazo a una presentación que muestra una próxima versión de Android Messages. Tiene todas las características que espera ofrecer. Los mensajes entregados a través del chat resultan ser azules. Pero eso fue sólo una casualidad: una de las características de Mensajes de Android es que puedes elegir un color personalizado para tus mensajes de chat, dependiendo de con quién estés hablando. Esto es Android, después de todo, y Android es todo sobre la personalización.

La personalización es desordenada. Android es desordenado. Así que tiene sentido que la solución definitiva para la mensajería de Android no fuera eliminar el desorden, sino aceptarlo.