No consuma alcohol ni medicamentos que contengan alcohol mientras esté recibiendo tratamiento con HIDROcodona. Esto puede aumentar los efectos secundarios sobre el sistema nervioso, tales como somnolencia, mareos, aturdimiento, dificultad para concentrarse y deterioro del pensamiento y del juicio. En casos graves, puede producirse presión arterial baja, dificultad respiratoria, desmayos, coma o incluso la muerte. Si está tomando determinadas fórmulas de hidrocodona de acción prolongada, el consumo de alcohol también puede provocar una rápida liberación del fármaco, dando lugar a niveles sanguíneos elevados que pueden ser potencialmente letales. Asimismo, debe evitar el consumo de pomelo y zumo de pomelo, ya que puede aumentar los niveles en sangre y los efectos de la hidrocodona. Hable con su médico o farmacéutico si tiene dudas sobre cómo tomar este u otros medicamentos que le hayan recetado. No use más de la dosis recomendada de HIDROCODONA y evite las actividades que requieran agudeza mental, como conducir o manejar maquinaria peligrosa, hasta que sepa cómo le afecta el medicamento. Es importante que informe a su médico de todos los demás medicamentos que utiliza, incluidas las vitaminas y las hierbas. No deje de usar ningún medicamento sin hablar primero con su médico.

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