Jackie Robinson

Jackie Robinson fue el primer estadounidense de raza negra que se incorporó a las grandes ligas de béisbol en 1947 como miembro destacado de los Dodgers de Brooklyn. La creencia de Robinson en la igualdad le dio la oportunidad de llevar el mensaje a Estados Unidos y al mundo de que la raza no debe ser una consideración para nada.

Es difícil creer que los deportes estadounidenses del pasado sólo permitían jugadores blancos. Robinson creció en una familia pobre en California, pero su familia siempre verificó que debían tener orgullo y honor en todo lo que hicieran en la vida. California no tenía el mismo nivel extremo de prejuicios que tenían muchos de los otros estados durante esa época. Robinson se inspiró en su hermano mayor, que ganó una medalla de plata en las Olimpiadas celebradas en la Alemania de Hitler y, sin embargo, cuando regresó a Estados Unidos no pudo conseguir ningún trabajo, excepto el de recogedor de basura.

Robinson no estaba acostumbrado a la segregación cuando entró en el servicio militar y se negó a trasladarse a la «sección de negros» que el ejército le exigía. Comenzó a luchar contra el sistema de desigualdad incluso durante las primeras áreas de su vida. Cuando iba a ser sometido a un consejo de guerra por sus acciones, la noticia se difundió por todo el país en las publicaciones de la NAACP y los cargos fueron retirados.

Robinson siempre había estado involucrado en el atletismo en la escuela secundaria y más tarde en la universidad. En 1944 se unió a una de las ligas de béisbol afroamericanas, llamadas «Ligas Negras». Había un movimiento dentro del béisbol para intentar integrar el deporte y el presidente de los Dodgers de Brooklyn, Branch Rickey, buscaba un posible miembro del equipo que tuviera honor e integridad y contara con un excelente historial. En 1946 se convirtió en miembro del equipo totalmente blanco llamado Montreal Royals, que era una sucursal de los Brooklyn Dodgers. Este fue un momento histórico, ya que fue el primer jugador de béisbol afroamericano en un equipo blanco.

Como miembro del equipo, Robinson experimentó todas las formas de discriminación racial e incluso violencia potencial. La gente le gritaba e insultaba y le arrojaba cosas, pero él le había prometido a Rickey que no se defendería. La peor situación que se produjo fue durante un partido de los Phillies de Filadelfia, cuando el equipo contrario se negó a jugar con un americano negro e incluso su propio equipo se opuso. En ese momento, Leo Durocher, el entrenador de los Dodgers, dijo a su equipo que prefería cambiarlos a todos antes que perder a Robinson. Esto marcó la pauta para los futuros partidos de béisbol.

Robinson no era sólo un jugador de béisbol, era un jugador increíblemente talentoso. El primer año con los Dodgers, conectó 12 jonrones y los Dodgers ganaron el banderín de la Liga Nacional. Ese mismo año, Robinson fue elegido como el Novato del Año y elevó su capacidad de juego al tener un promedio de bateo de .342 durante la temporada de 1949, fue líder en la mayor cantidad de bases robadas y ganó el Premio al Jugador Más Valioso de la Liga Nacional. A lo largo de su carrera, el equipo de los Dodgers ganó varias veces el banderín nacional y la Serie Mundial en 1955.

En la raíz de todos los esfuerzos de Robinson estaba su continua búsqueda de la igualdad en los deportes y en todas las facetas de la vida estadounidense. Cada vez que Robinson conseguía un premio o reconocimiento, incluía comentarios sobre su pasión por la igualdad. A medida que su popularidad crecía, la resistencia a tener jugadores afroamericanos también disminuía. En 1949 testificó ante la Cámara de Actividades Antiamericanas sobre el tema de la discriminación y en 1952 anunció públicamente que el equipo de los Yankees era una organización racista por no haber roto el equipo de todos los blancos con gente de color como habían hecho los Dodgers cinco años antes.

Jackie Robinson se retiró del béisbol en 1957 y continuó como hombre de negocios, apoyando al Freedom Bank, que fue el primer banco controlado por afroamericanos y participó en la NAACP como miembro de la junta. En 1962, Robinson fue el primer afroamericano en ingresar en el Salón de la Fama del Béisbol y los Dodgers retiraron su uniforme con el número 42 en 1972; número que nunca se asignó a nadie más.