Kaiser Permanente está convirtiendo un almacén existente en Berkeley en un centro de pruebas de 14 millones de dólares que podrá procesar 70.000 pruebas para COVID-19 cada semana.

El nuevo laboratorio, en el 1795 de la calle Second, estará totalmente operativo el 1 de junio y servirá como principal centro de pruebas de Kaiser en el norte de California, según el Dr. Brian Missett, director ejecutivo asociado de The Permanente Medical Group. Está separado de un nuevo proyecto de consultorios médicos en la avenida San Pablo, al sur de la calle Parker, que se inaugurará en 2021.

El personal de Berkeley trabajó durante el fin de semana y aprobó el permiso de construcción en sólo cinco días después de que Kaiser presentara su solicitud el 16 de marzo. El departamento de planificación de la ciudad proporcionará inspecciones de construcción las 24 horas del día, día o noche, para mantener el calendario acelerado y tener la instalación terminada en un mes, dijo Timothy Burroughs, director del departamento de planificación y desarrollo de la ciudad.

«Este es un proyecto que tiene el potencial de impactar en toda la región con herramientas críticas en medio de un momento sin precedentes», dijo Burroughs. «Estamos haciendo todo lo posible para ayudar a Kaiser a sacar esto adelante».

Las pruebas estarán disponibles para los 4,5 millones de miembros de Kaiser en el norte de California, entre los que se encuentran los beneficiarios de Medi-Cal, Covered California y la asistencia sanitaria comunitaria gratuita o de coste reducido a través de Kaiser. El laboratorio contará con una docena de trabajadores y empezará haciendo pruebas a los pacientes con alto riesgo de contraer el virus, basándose en las directrices de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos. Las pruebas producirán resultados en menos de 24 horas, mientras que otras han tardado entre 10 y 14 días.

Kaiser ampliará las pruebas a otros pacientes a medida que las jurisdicciones locales empiecen a relajar las restricciones de los refugios y la identificación de pacientes asintomáticos con el rastreo de contactos sea más importante. El sistema también está aumentando sus pruebas internas de 1.000 a 1.500 al día, lo que incluye pruebas con un tiempo de respuesta de 10 minutos para aquellos pacientes que ya están hospitalizados.

La nueva instalación no procesará pruebas de serología/anticuerpos, según un portavoz de Kaiser.

A pesar de una escasez crítica de pruebas en todo California y el país, Missett dijo que el sistema hospitalario está trabajando con múltiples proveedores para asegurar las pruebas de diagnóstico, los reactivos de las pruebas, el equipo y los suministros para apoyar una capacidad de 10.000 pruebas al día. Kaiser no puede revelar los nombres de las empresas que proporcionarán las pruebas, dijo un portavoz del hospital. Kaiser ha trabajado anteriormente con Roche Diagnostics, una gran empresa farmacéutica que suministra miles de pruebas de COVID-19 a laboratorios de todo el mundo.

La instalación de pruebas forma parte de un plan más amplio para combatir el COVID-19 y aumentar la capacidad de pruebas para los meses y años venideros, ya que el rastreo de contactos se convierte en una parte más crucial de la estrategia de los departamentos de salud pública locales. En el futuro, los afiliados podrían recibir una notificación móvil de que deben hacerse las pruebas por haber estado en una zona expuesta al virus.

«Aunque muchos grupos privados y públicos están trabajando en un sistema para identificar a los pacientes con riesgo de exposición, prevemos tener la capacidad de coordinar con los posibles sistemas de rastreo para ofrecer pruebas a los pacientes con riesgo de una exposición una vez que esos sistemas estén en marcha», dijo Missett.

La División de Salud Pública de Berkeley se encargará de adoptar un sistema de rastreo y seguimiento de contactos para sus residentes y ha identificado el rastreo de contactos como una de sus prioridades, junto con el aumento de la capacidad de realización de pruebas. A principios de este mes, San Francisco presentó una asociación para realizar un rastreo de contactos generalizado con DIMAGI, una empresa de software que ha trabajado con los CDC. Si Berkeley sigue un camino similar, Kaiser trabajará con la ciudad y el condado para que sus miembros se sumen a la iniciativa.

Por separado, pero también en West Berkeley, Kaiser ha convertido una carpintería que tiene allí en una fábrica para hacer protectores faciales para las enfermeras y los médicos del proveedor de servicios sanitarios.