Aproximadamente 173.000 personas en los Estados Unidos viven con linfoma de Hodgkin, o están en remisión. Menos frecuente que el linfoma no Hodgkin, el linfoma de Hodgkin (a veces denominado linfoma de Hodgkin) es una neoplasia de los linfocitos B, una célula importante del sistema inmunitario. Esta célula B maligna se conoce como célula de Reed-Sternberg.
El doctor Arnold Freedman, director clínico del Programa de Linfoma en Adultos del Centro Oncológico Dana-Farber/Brigham and Women’s, responde a algunas preguntas sobre la enfermedad:
1. ¿Cuáles son los diferentes tipos de linfoma de Hodgkin? Existen dos tipos principales:
- Clásico – Es la forma más común, que puede dividirse en cuatro subtipos, incluyendo el esclerosante nodular, el de celularidad mixta, el de depleción linfocítica y el rico en linfocitos.
- Linfopredominante nodular (NLPHL) – Una forma rara de linfoma de Hodgkin que es una enfermedad de crecimiento lento.
2. ¿Cuáles son los factores de riesgo del linfoma de Hodgkin? La edad y el sexo pueden aumentar la probabilidad de desarrollar un linfoma de Hodgkin. Otros factores de riesgo son:
- Ser joven o adulto tardío
- Ser varón
- Estar expuesto al virus de Epstein-Barr
- Tener un familiar de primer grado (padre o hermano) con linfoma de Hodgkin
3. ¿Cuáles son los síntomas del linfoma de Hodgkin? Los signos más comunes del linfoma de Hodgkin son la inflamación (indolora) de los ganglios linfáticos del cuello, la axila o la ingle, así como fiebre, sudores nocturnos y pérdida de peso. Otros síntomas pueden ser picor en la piel, fatiga, tos o dificultad para respirar.
4. ¿Cómo diagnostican los médicos el linfoma de Hodgkin? Normalmente, el médico realizará primero un examen físico para comprobar si hay signos de salud y cualquier bulto inusual. El médico también comprobará los análisis de sangre rutinarios y realizará exploraciones, como una tomografía computarizada o una resonancia magnética.
Una biopsia del tejido o de los ganglios linfáticos afectados es esencial para realizar un diagnóstico. A continuación, un patólogo examina el tejido de los ganglios linfáticos para buscar las células B malignas.
El médico puede decidir realizar análisis de sangre adicionales, incluyendo un estudio de química sanguínea y un control de la velocidad de sedimentación globular.
5. ¿Cuáles son las opciones de tratamiento para el linfoma de Hodgkin? Existen dos herramientas principales utilizadas en el tratamiento estándar del linfoma de Hodgkin: La quimioterapia y la radioterapia.
La quimioterapia combinada se utiliza tanto en los estadios tempranos como en los avanzados de la enfermedad, y dependiendo del estadio o de la extensión de la enfermedad, se añade radioterapia a las partes del cuerpo donde hay focos de la enfermedad.
Los pacientes con una recurrencia de la enfermedad pueden ser considerados para un trasplante de células madre. Estos trasplantes suelen utilizar las propias células madre del paciente.
Los ensayos clínicos de nuevas combinaciones de quimioterapia también son una opción para los pacientes en todos los estadios del linfoma de Hodgkin, así como para los pacientes con una forma recurrente de la enfermedad. Dana-Farber tiene actualmente varios ensayos clínicos abiertos para pacientes con linfoma de Hodgkin y el Instituto Nacional del Cáncer mantiene una lista de ensayos clínicos en clinicaltrials.gov.