Compartir
Hasta el 80% de las personas con apnea obstructiva del sueño (AOS) no están diagnosticadas. Eso significa que no reciben el tratamiento que necesitan para mejorar su sueño y reducir el riesgo de padecer enfermedades graves.
Afortunadamente, el diagnóstico es cada vez más fácil a medida que mejora el acceso a los estudios del sueño en laboratorio, dice Nancy Foldvary-Schaefer, DO, MS, directora del Centro de Trastornos del Sueño de la Clínica Cleveland. Y muchos pacientes pueden beneficiarse de una prueba del sueño más sencilla en casa.
Responda a estas 8 preguntas
Antes de preguntar por una prueba del sueño, responda a estas preguntas:
- ¿Ronca fuerte (más fuerte que al hablar o lo suficientemente fuerte como para que se oiga a través de puertas cerradas)?
- ¿Se siente a menudo cansado, fatigado o somnoliento durante el día?
- ¿Ha observado alguien que deja de respirar mientras duerme?
- ¿Tiene la presión arterial alta?
- ¿Su índice de masa corporal (IMC) es superior a 35?
- ¿Tiene más de 50 años?
- ¿La circunferencia de su cuello es superior a 40 centímetros?
- ¿Su sexo es masculino?
La Dra. Foldvary-Schaefer afirma: «Si responde afirmativamente al menos a tres de las ocho preguntas, tiene una alta probabilidad de padecer AOS.»
¿Cómo funcionan las pruebas de sueño en casa?
Un «sí» a tres de las ocho preguntas también significa que puede ser un candidato principal para las pruebas de sueño en casa.
Sólo queremos probar un diagnóstico, para poder empezar el tratamiento. Si podemos probarlo en una prueba del sueño en casa a un coste menor, lo haremos.
La prueba en casa es una versión reducida de lo que ocurre en una prueba del sueño en el laboratorio. Esto puede sonar atractivo para todos los pacientes, pero las pruebas en casa son sólo para personas con una alta probabilidad de AOS que no tienen otros trastornos del sueño, como el síndrome de las piernas inquietas o el insomnio, o trastornos médicos, como arritmias cardíacas o insuficiencia cardíaca.
Para una prueba en casa, por lo general usted recibirá primero la educación de un tecnólogo del sueño. A continuación, recibirá un kit casero con instrucciones sencillas de uso. A lo largo de una noche de sueño, cuatro sensores medirán el flujo de aire a través de la boca y la nariz, los movimientos de la pared torácica, los niveles de oxígeno y la frecuencia cardíaca.
Si las pruebas confirman la AOS, estará preparado para recibir el tratamiento que necesita.
Pruebas de laboratorio: para casos complejos
Las pruebas caseras no son para todo el mundo. Se utiliza para confirmar el diagnóstico de AOS cuando se sospecha clínicamente, dice la Dra. Foldvary-Schaefer, porque no diferencia la enfermedad leve del sueño normal.
Tampoco sirve para las personas cuya probabilidad de AOS no está clara, como las que no cumplen muchos de los criterios de las ocho preguntas anteriores. Para estas personas, así como para las que padecen ciertas afecciones cardíacas y neurológicas, la prueba del sueño en el laboratorio (polisomnograma) sigue siendo el estándar de oro.
Mientras que las pruebas caseras miden cuatro parámetros, las pruebas en el laboratorio miden hasta 20, incluyendo las ondas cerebrales, los movimientos de las piernas, los niveles de dióxido de carbono y otros. El objetivo es ofrecer un diagnóstico más preciso en los casos más complicados.
Muchas personas se ponen nerviosas ante las pruebas de laboratorio, pero los centros del sueño intentan imitar el entorno doméstico en la medida de lo posible, con camas cómodas y un ambiente similar al de un hotel. Se le anima a que traiga todo lo que necesita para su rutina habitual a la hora de acostarse: material de lectura, medicamentos, su almohada favorita.
«La mayoría de la gente no dormirá como en casa», dice la Dra. Foldvary-Schaefer. «Pero si somos capaces de capturar algunas horas de sueño, normalmente obtenemos lo que necesitamos para hacer un diagnóstico y ayudar a los pacientes a recibir tratamiento.»
Compartir
- CPAP sueño apnea trastornos del sueño pruebas del sueño