Objetivo: Evaluar la eficacia del clorhidrato de tizanidina frente a placebo como tratamiento profiláctico adjunto para la cefalea crónica diaria (migraña crónica, cefalea migrañosa o cefalea tensional).
Antecedentes: La tizanidina es un agonista alfa2-adrenérgico que inhibe la liberación de norepinefrina tanto en la médula espinal como en el cerebro, con efectos antinociceptivos que son independientes del sistema opioide endógeno. Estudios abiertos anteriores han sugerido que el fármaco puede ser eficaz para el tratamiento de la cefalea crónica diaria.
Métodos: Doscientos pacientes completaron un período basal de 4 semanas, a ciegas y con placebo, de los cuales 134 cumplían los criterios de selección y luego fueron aleatorizados a tizanidina o placebo. Noventa y dos pacientes completaron al menos 8 semanas de tratamiento (tizanidina, n = 45; placebo, n = 47), y 85 pacientes completaron 12 semanas de tratamiento (tizanidina, n = 44; placebo, n = 41). La mayoría de los pacientes (77%) cumplían los criterios diagnósticos de migraña de la Sociedad Internacional de Cefaleas; el 23% tenía cefalea migrañosa crónica o cefalea tensional crónica. La tizanidina se tituló lentamente a lo largo de 4 semanas hasta alcanzar los 24 mg o la dosis máxima tolerada (media, 18 mg; DE, 6,4; mediana, 20,0; rango, 2 a 24), dividida en tres intervalos de dosis al día. El índice de cefalea global (/28 días) fue el criterio de valoración principal.
Resultados: La tizanidina demostró ser superior al placebo en la reducción del índice global de cefalea (P =0,0025), así como en la media de días de cefalea por semana (P =0,0193), los días de cefalea grave por semana (P =0,0211), la intensidad media de la cefalea (P =0,0108), la intensidad máxima de la cefalea (P =0,0020) y la duración media de la cefalea (P =0,0127). El porcentaje medio de mejora durante las últimas 4 semanas de tratamiento con tizanidina frente a placebo fue del 54% frente al 19% para el índice de cefalea (p = 0,0144), del 55% frente al 21% para los días de cefalea intensa (p = 0,0331), del 35% frente al 19% para la duración de la cefalea (p = 0,0142), del 35% frente al 20% para la intensidad máxima de la cefalea (p = 0,0106), del 33% frente al 20% para la intensidad media de la cefalea (p = 0,0281) y del 30% frente al 22% para el total de días de cefalea (p = 0,0593). Los pacientes que recibieron tizanidina también obtuvieron puntuaciones más altas en cuanto a la mejoría general del dolor de cabeza en una escala analógica visual (p = 0,0069). No hubo diferencias estadísticamente significativas en los resultados de los pacientes con migraña crónica frente a los que sólo tenían cefalea migrañosa o tensional. Los efectos adversos notificados por más del 10% de los pacientes incluyeron somnolencia (47%), mareos (24%), sequedad de boca (23%) y astenia (19%). Los abandonos debidos a acontecimientos adversos no difirieron significativamente entre tizanidina y placebo.
Conclusiones: Los resultados apoyan la tizanidina como un complemento profiláctico eficaz para la cefalea crónica diaria, incluyendo la migraña, la cefalea migrañosa y la cefalea de tipo tensional. Estos resultados también sugieren la posible importancia de un mecanismo alfa2-adrenérgico subyacente a la fisiopatología de este espectro de trastornos de cefalea.