El lunes 11 de junio entra en vigor el retroceso de las normas de neutralidad de la red por parte de la FCC, pero no espere que Internet cambie de la noche a la mañana.

Todavía tenemos vías prometedoras para restaurar las normas de neutralidad de la red, lo que significa que los proveedores de servicios de Internet tienen que tener cuidado con la cantidad de munición que nos dan en esa lucha política. Si se manifiestan sobre la discriminación o el gouging de los clientes, aumentan la posibilidad de que tengamos éxito y restablezcamos las reglas de neutralidad de la red vinculantes.

Al igual que en los diez años anteriores a la Orden de Internet Abierto de 2015, los ISP siguen siendo disciplinados por la amenaza de regulación si generan demasiados ejemplos de abuso.

Lo que sucederá, sin embargo, y lo que ya hemos visto bajo la FCC de Trump, es que los ISP juegan en los márgenes. Tanto los ISP de telefonía fija como los de telefonía móvil con límites de datos ya han estado empujando a los clientes a determinados servicios y medios de comunicación con zero-rating y throttling. Y han estado presionando mucho para meternos a todos en carriles lentos a menos que los sitios que visitamos paguen dinero de protección – Verizon incluso dijo a los jueces federales que haría esto si no había reglas de neutralidad de la red.

Los ISP ganan al crear escasez artificial – reduciendo el ancho de banda disponible para llegar a sus clientes para que puedan hacer que la gente puje por el privilegio. Lo sabemos porque rechazan ofertas para construir la infraestructura que evitaría la congestión, como cuando Netflix se ofreció a construir una red de entrega de contenidos para Comcast, de forma gratuita. Comcast se negó y, finalmente, pudo utilizar la congestión para obligar a Netflix a pagar.

La eliminación de la neutralidad de la red no conducirá a una mayor inversión, sino a una menor, porque significa que los ISP tienen la opción de subastar el acceso limitado a los clientes.

Puede esperar una Internet más lenta cuando intente visitar los sitios menos populares, y en la que los servicios en línea sean un poco más caros porque tienen que pagar dinero de protección a los ISP. Será más difícil para las nuevas empresas entrar y competir con las que pagaron por las vías rápidas, y los recursos de información sin ánimo de lucro en la web serán más difíciles de usar.

No va a ser un apocalipsis llamativo; será un lento declive hacia la Internet del control de los ISPs, y probablemente ni siquiera sabrás qué servicios tan buenos y recursos tan útiles te estás perdiendo. Y un día, cuando los ISP estén seguros de su victoria, tantearán el terreno y verán si pagas más para acceder a cualquier cosa que no sea Facebook, o la plataforma de vídeo de Comcast, o los socios de pago de AT&T.

Pero aún hay tiempo para evitar este futuro. Hemos ganado en el Senado y ahora es el momento de que la Cámara de Representantes vote para restablecer la Orden de Internet abierta y proteger la Internet neutral y vibrante.

Actuar

Salvar las normas de neutralidad de la red