Desde el estreno de Pulp Fiction en 1994, los fans se han hecho la misma pregunta: ¿quién es el cojo? Ahora, Quentin Tarantino ha dado por fin una respuesta.
En una de las escenas más locas de la película, Butch (Bruce Willis) y Marsellus Wallace (Ving Rhames) están prisioneros en el sótano del dueño de la casa de empeños, Maynard (Duane Whitaker). Mientras Butch y Marsellus están atados y amordazados, Maynard pide a su guardia de seguridad que «saque al cojo». Saliendo de una jaula cerrada, el cojo está vestido de pies a cabeza con un traje de cuero de bondage, y es mudo durante toda la escena (excepto por algunos gritos apagados).
No se proporciona ninguna información sobre el cojo, lo que lleva a los fans a preguntarse quién es, por qué está en una jaula, y cuánto tiempo ha estado allí. En una entrevista con Empire, Tarantino ha ofrecido una breve historia de fondo. «Era como un autoestopista», explica, «o alguien a quien recogieron hace siete años, y lo entrenaron para que fuera la víctima perfecta.»
¿Y qué pasó con el cojo después del golpe de Butch? «No se desarrolla así en la película», ofrece Tarantino, «pero en mi mente cuando la escribí, el cojo está muerto. Butch lo noqueó y luego, cuando se desmayó, se colgó».
El cojo fue interpretado por Steve Hibbert, quien -hasta ahora- tampoco tenía idea de la historia de fondo de su personaje. En una entrevista de 2014 con Vulture, Hibbert explicó que dedujo que no era la primera víctima de Maynard, a juzgar por la jaula en la que vivía. Al hablar de cómo fue el rodaje de la escena, el actor dijo: «Tarantino me dio muy pocas indicaciones, en realidad. Le miraba y él se encogía de hombros, me daba un pulgar hacia arriba, y eso era todo».
Mira la memorable escena a continuación.