¿Qué es el TAG?
El Trastorno de Ansiedad Generalizada se caracteriza por una preocupación excesiva y una ansiedad difícil de controlar. Se acompaña de síntomas como fatiga, inquietud, irritabilidad, tensión muscular y posible insomnio. Los individuos con TAG suelen preocuparse por una variedad de cosas, más que por un tema específico (American Psychiatric Association, 2000). El TAG es un trastorno de ansiedad básico (Brown, Barlow, & Leibowtiz, 1994), a partir del cual se desarrollan otros trastornos de ansiedad y del estado de ánimo. Muchos pacientes con TAG también presentan trastornos comórbidos como fobia social, trastorno de pánico y depresión mayor (Heimberg, Turk, & Mennin, 2004). El tratamiento exitoso del TAG a menudo resulta en la mejora de estos trastornos comórbidos (Borkovic, Abel, & Newman, 1995).
Conceptualización en un marco de TCC
El modelo cognitivo-conductual del TAG enfatiza cómo los sesgos negativos en el pensamiento de un individuo contribuyen a la ansiedad. En el TAG, el sesgo predominante es la tendencia a anticipar lo peor y asumir que lo peor es lo más probable que ocurra. El modelo de la TCC también hace hincapié en la tendencia de los individuos con TAG a subestimar su capacidad para hacer frente a los problemas previstos, lo que aumenta la ansiedad (Beck, Emery & Greenberg, 1985). Los individuos con TAG pueden utilizar la preocupación como una forma ineficaz de afrontamiento o resolución de problemas. Cuando nos preocupamos, podemos crear la ilusión de que estamos «en un problema» o abordándolo, cuando en realidad lo único que estamos haciendo es pensar, y pensar de forma catastrófica. La TCC ayuda a cortocircuitar este flujo cognitivo y a pasar más rápidamente a la resolución de problemas. La preocupación también puede ser una forma de evitar emociones o pensamientos no deseados (Wells, 1997). Desgraciadamente, evitar los pensamientos y los sentimientos sólo aumenta el miedo a ellos. Por esta razón, la TCC ayuda a los clientes a tomar conciencia de estos pensamientos y sentimientos.
El objetivo principal de la terapia cognitivo-conductual para el TAG es disminuir la preocupación excesiva. En el tratamiento, los clientes aprenderán a identificar y modificar las creencias sobre la preocupación utilizando estrategias de reestructuración cognitiva como cuestionar la evidencia y la validez de la preocupación, desafiar las valoraciones sobre la incontrolabilidad de la preocupación y normalizar. Además, los clientes trabajarán para cambiar su tendencia a sobreestimar la amenaza y aprenderán habilidades de afrontamiento (Wells, 1997). Dado que los pensamientos de preocupación se centran en el futuro, las personas con preocupación crónica experimentan una disminución del contacto con el momento presente. Por esta razón, la atención plena, la habilidad de traer la conciencia al momento presente, es una parte importante del tratamiento del TAG (Borkovec & Sharpless, 2004).
Para programar una cita para las preocupaciones relacionadas con el TAG, complete este formulario o llámenos al 212-546-9200