Bienvenidos de nuevo a Look of the Week, celebrando lo mejor de la excelencia sartorial de la televisión y el cine, pasado y presente a través de la ciencia ficción, el terror, la fantasía y otros clásicos del género.

Buffy Summers (Sarah Michelle Gellar) no pudo vivir los momentos importantes como una adolescente normal. Los cumpleaños se vieron muy afectados por una serie de incidentes sobrenaturales, como la pérdida del alma de su novio y una prueba draconiana cortesía del Consejo de Vigilantes. No era Halloween de lo que Buffy tenía que cuidarse, sino los días previos e inmediatamente posteriores al 19 de enero. Es poco probable que recuerde con cariño los acontecimientos que rodean su cumpleaños, y ¿quién puede culparla?

No obstante, para celebrar el 39º año de Buff alrededor del sol, he aquí un repaso a los looks de finales de los 90 de Buffy Cazavampiros y las elecciones simbólicas que hay detrás de estas prendas.

La pesadilla se convierte en realidad para Buffy cuando su 17º cumpleaños es secuestrado por el ruin plan de Drusilla (Juliet Landau) y Spike (James Marsters) en la segunda temporada. En lugar de disfrutar de la fiesta de cumpleaños sorpresa en el Bronce, se le regala un nuevo demonio al que enfrentarse. ¿Cuál es la política de devolución de esto? Al menos Ángel (David Boreanaz) consiguió sus joyas antes de que todo se fuera al infierno. El anillo Claddagh es simbólico por varias razones, incluyendo un vínculo con la herencia irlandesa de Ángel (no hablemos de su acento en el flashback), pero también sirve como declaración de amor antes de que la pareja pase al siguiente nivel.

Diferencia de edad aparte -que es difícil de ignorar, lo sé- es una dulce declaración y un regalo perfecto, que encaja con la estética de Buffy de llevar anillos. Todavía experimentando la fase de luna de miel, la emoción exacerbada de esta vida llena de peligros unida a este gesto romántico da como resultado que una cosa lleve a la otra.

Antes, en «Surprise», Buffy ha llevado un conjunto para ir al colegio que podría servir también para salir: un minivestido blanco y negro combinado con unas botas blancas tipo go-go es tal vez un poco elegante para el día, pero el hecho de ponerle una chaqueta blanca de gran tamaño por encima hace que este look mod-adyacente sea más apropiado para el entorno (aunque la chaqueta en sí no haya envejecido especialmente bien). No es una prenda de abrigo para Buffy.

Más tarde, se pone una camisa de terciopelo floreada (porque estamos en 1998, véase también su mochila de cuero) y unos pantalones verdes que están bien para patrullar, pero no es el atuendo de fiesta de cumpleaños de nuestros (o de ella) sueños. Pero los vampiros y las fiestas sorpresa no van precisamente de la mano. Hay un hilo de ropa inocente a lo largo de su episodio de cumpleaños, con la diseñadora de vestuario Cynthia Bergstrom duplicando esta noción al poner a Buffy en un vestido de seda de color marfil en su pesadilla. El uso del blanco tiene varios propósitos – incluyendo el elemento de pureza, ya que se lee como una novia – y también pone a la audiencia en alerta de que la sangre podría ser derramada. El rojo es el más potente visualmente contra los tonos claros.

Coincidentemente, también se parece al vestido de graduación que llevaba mientras se enfrentaba al Amo en la primera temporada. Las «visiones» de Buffy suelen mostrarla vestida con un atuendo delicado (incluyendo el pijama de satén de la escena inicial), lo que enfatiza aún más lo vulnerable que se siente. Los cumpleaños no son siempre una ocasión alegre, y Buffy Cazavampiros subraya lo ansioso que puede ser este día, por mucho que tus amigos pretendan celebrarlo contigo. A veces la vida -o, en este caso, el miedo a la muerte de un ser querido- se interpone en el camino.

Es necesario cambiarse de ropa después de un chapuzón improvisado en las alcantarillas, y al menos los pantalones de Buffy adquieren el espíritu de los estampados divertidos para equilibrar el beige de su conjunto de cami y rebeca a juego. A nadie le gustan más los tirantes de espagueti que a nuestra chica la Cazadora.

Otra pelea sin cuartel lleva a una huida a casa de Ángel, pero no antes de que les sorprenda un chaparrón, que obliga a quitarse otro conjunto de ropa mojada, que se derrama en el deseo. Hay algo muy raro en que el primer encuentro sexual de Buffy resulte en una ruptura tan devastadora. Seguro, hay muchos incidentes de personas que pierden su virginidad sólo para tener sus corazones pisoteados, pero esto se siente como un juicio hacia ella teniendo sexo en primer lugar. Ella no se queda embarazada ni contrae una enfermedad de transmisión sexual, pero el hecho de que Ángel pierda su alma es el equivalente vampírico y huele a vigilancia de la moralidad. Por supuesto, existe el impulso de subrayar lo horrible que es para Buffy en términos de su pérdida, pero aún así no significa que tenga que estar de acuerdo con esta elección narrativa – ¡y en su cumpleaños, además!

También es notable que después de que Buffy y Angel hacen el acto en «Innocence», ella lleva encaje negro como una forma de significar su sexualidad. Después de descubrir que Angelus ha regresado, su chaqueta blanca es sustituida por una negra, lo que puede leerse como un atuendo de luto, pero también la hace parecer más badass – ya sea sosteniendo una ballesta o un arma antitanque.

Si el blanco y el negro se utilizan en los episodios de cumpleaños de la segunda temporada de Buffy para evocar la batalla entre la pureza y la sexualidad de los adolescentes, su siguiente hito de edad se convierte en todo un simbolismo de cuento de hadas. Se ve despojada de sus habilidades en un episodio que redobla la crueldad de los hombres en su vida.

Primero, su padre cancela su reunión anual de cumpleaños, y luego la otra figura paterna en su vida la traiciona de una manera que corta profundamente. El Consejo de Vigilantes es un símbolo del patriarcado, y no es de extrañar que el vestuario de Buffy retroceda a la imaginería infantil, desde el guiño manifiesto a Caperucita Roja hasta el mono vaquero que retrocede visualmente en el tiempo.

Ambos son looks muy monos, pero no es casualidad que se la infantilice cuando se enfrenta a la prueba del Cruciamentum, una prueba que la despoja de los poderes que ella cree que la definen. Pero el denim también se inclina por la Final Girl de todo ello, sobre todo en el escenario de la casa de los horrores. Ella, por supuesto, triunfa, utilizando la inteligencia que posee y que no se puede quitar con las drogas. No importa lo que lleve puesto o si está a pleno rendimiento: Buffy triunfará.

«Lo importante es que he mantenido mi tradición especial de cumpleaños de miseria y horror desgarradores», señala la Cazadora al final de «Helpless», y cada temporada posterior (excepto la 7ª) sigue este mandato. Así que, dondequiera que estés en tu cumpleaños este año, Buffy, esperemos que tu atuendo no sea necesario para patear culos y que esta tradición anual se haya roto finalmente.