El movimiento religioso &político Rastafari comenzó en los barrios bajos de Jamaica en los años 20 y 30, a través de las enseñanzas de Marcus Garvey, un negro jamaicano que lideró el movimiento «Back to Africa». Creía que los africanos eran los verdaderos hijos de Dios y que habían sido exiliados a Jamaica y otras partes del mundo como castigo divino. Fomentó el orgullo de ser negro y trabajó para revertir el sentimiento de inferioridad y opresión que muchas personas sentían en estos tiempos de gran pobreza, racismo y discriminación de clase.

Los seguidores de las enseñanzas de Garvey creían que el emperador de Etiopía Haile Selassie era el mesías que había sido predicho en la biblia, y que su coronación en 1930 significaba que el castigo divino se había completado y que comenzaría el retorno a África (la «Tierra Prometida»). Mientras buscaban la tierra prometida, también se resistían a la opresión de «Babilonia»: el mundo capitalista, materialista y opresivo.

El movimiento rasta se hizo visible por primera vez en los barrios marginales de Kingston en la década de 1930, y surgieron muchas comunidades pacíficas en las que la gente desarrollaba un estilo único de lenguaje, peinado, arte y música. El rastafari más famoso es probablemente el cantante Bob Marley, cuyas letras y celebridad dieron a conocer el movimiento jamaicano a nivel internacional.

Algunos rastafaris consideran el rasta como una filosofía de vida, mientras que otros lo ven como una religión. Sin embargo, lo que une a todos los rastas es la creencia en la divinidad de Haile Selassie, la resistencia a la opresión y el orgullo por la herencia africana. El estilo de vida rasta suele incluir el vegetarianismo, llevar el pelo con rastas, evitar el alcohol y el uso ritual de la marihuana.

Colores rasta:

Los colores rojo, dorado y verde tienen un significado espiritual especial para los rastafaris. Originalmente estos colores estaban en la bandera etíope, que los rastas adoptaron para mostrar su lealtad al emperador etíope Selassie, a Etiopía y a África. La bandera de la «Unidad Panafricana» de Marcus Garvey incorporó estos colores junto con el negro, para representar también el color de los africanos.

El rojo representa la sangre de los mártires en la lucha negra por la liberación, que sangra a la tierra y repone la tierra, ayudando a crecer a las plantas. El oro representa la abundante riqueza natural de su tierra natal, África, y también el sol, que da fuerza a todos. El verde simboliza la belleza y la exuberante vegetación de África.

Rastas:

Uno de los símbolos más visibles de la cultura rasta es llevar el pelo con rastas. Los rastas llevan el pelo así por varias razones. Una de ellas es el mandamiento bíblico de no cortarse el pelo (Levítico 21:5). Las rastas también representan la melena del león, que simboliza la fuerza, Etiopía, África y el León de Judá. Este estilo de pelo también celebra la naturalidad y la sencillez, que son cualidades orgánicas simbólicas para los rastas de África.

Los rastas también consideran que cultivar sus rastas es un viaje espiritual y mental que enseña la paciencia. Se cree que es a través de la paciencia que el no peinarse, cortarse o lavarse con otra cosa que no sea agua limpia y natural crea finalmente la admirable melena de rastas de León.

León de Judá:

El León de Judá proviene originalmente del libro del Génesis en la biblia. En el cristianismo, el león se considera representante de Jesucristo. En el judaísmo, el león representa a la tribu de Judá. En el rastafari, Haile Selassie es venerado tanto como Jah (Dios) , la reencarnación de Cristo, como el León mencionado en el libro de las Revelaciones. El León de Judá representa para todas estas culturas la fuerza, el valor, la vigilancia y el orgullo de la propia herencia.

No es necesario ser rastafari para tener rastas o llevar los colores rasta, pero es bueno conocer la importancia histórica y el significado de nuestras elecciones de moda. Cuando llevamos los colores o estilos rasta, lo hacemos con un espíritu de igualdad y amor por nuestro planeta y por TODA la gente que lo habita.